
Por orden judicial, la Ciudad de Buenos Aires llevó adelante el desalojo de un inmueble ocupado ilegalmente en la intersección de Defensa 165 y Alsina, conocido como la “Casa Blaquier”, ubicado en pleno Casco Histórico porteño.
El operativo contó con la participación de funcionarios de la Red de Atención del Ministerio de Desarrollo Humano y Hábitat, operarios del Ministerio de Espacio Público, la Policía de la Ciudad y otras dependencias del Gobierno porteño.
Este edificio, construido a finales del siglo XIX, forma parte del patrimonio histórico de la Ciudad y es propiedad del Gobierno porteño. Además, está incluido dentro de las Casas Históricas que integran el Museo de la Ciudad. Se encuentra en el sector fundacional de Buenos Aires, sobre la calle Defensa, que en épocas coloniales se conocía como “La Calle Mayor”.
La desocupación del inmueble fue establecida inicialmente por el decreto 1480 de 2008, luego de que inspecciones realizadas por la Dirección General Guardia de Auxilio y Emergencias detectaran un “estado ruinoso, con un gran deterioro en las paredes, desprendimiento de mampostería y construcciones antirreglamentarias, comprometiendo la seguridad de las personas que habitaban el lugar”.
Durante los últimos meses, los ocupantes impidieron el ingreso de la Guardia de Auxilio para evaluar el riesgo de derrumbe del edificio. Según el último censo realizado en abril de 2024, en la Casa residían 84 personas.
En respuesta al desalojo, los ocupantes presentaron un recurso de amparo que fue rechazado en 2018 por una sentencia judicial. El fallo confirmó la desocupación del inmueble, siempre y cuando se garantice una solución habitacional para los afectados.
Además, sobre los residentes pesaban denuncias por episodios de violencia, ataques con piedras a un bar vecino y robos de sillas en el Museo de la Ciudad.
El Juzgado Contencioso Administrativo, Tributario y de Relaciones de Consumo de Primera Instancia Número 3 ordenó que la Ciudad ofreciera subsidios habitacionales a los ocupantes para facilitarles una vivienda digna tras el desalojo.