
María Salomea Sklodowska, médica, física y química, fue la primera mujer en ganar dos Premios Nobel. Es nada más ni menos que Marie Curie.
Nació en 1867 en Varsovia, Zarato de Polonia, imperio Ruso, hija del médico y matemático Wladyslaw Sklodowski y la pianista Bronislawa Boguska. La prematura muerte de su hermana de tifus y la de su madre de tuberculosis, hicieron que Marie perdiera su fe católica y despertara su interés por la medicina. Se educó clandestinamente a espaldas del régimen Ruso que imponía su idioma y costumbres en Polonia, por lo que al mudarse a París para ingresar a la Sorbona, debió esforzarse mucho en francés, matemáticas y física para estar a la par de sus compañeros. Hablaba en polaco, ruso, alemán, algo de francés e inglés.
Marie hizo el doctorado en ambas materias, donde conoció a Pierre Curie (1859-1906) físico francés pionero en el estudio de la radiactividad y descubridor de la piezoelectricidad, con quien se casó, tuvieron 2 hijas, Irene (1897-1956) científica como su madre, física y química, Premio Nobel de química en 1935. Eve Denise (1904-2007) periodista, pianista y activista por los derechos de los niños.
En diciembre de 1903, los Curie y Henri Becquerel (1852-1908) físico francés descubridor de la radiactividad, recibieron conjuntamente el premio Nobel de Física. Pierre Curie fue nombrado por cuatro miembros de la academia para compartir el premio Nobel con Henri Becquerel dejando a Marie Curie completamente afuera. “Si bien es cierto que se está pensando seriamente en mi primer premio, quiero de todo corazón para ser considerado conjuntamente con Marie en relación a nuestra investigación sobre los cuerpos radiactivos”. También reclamaba Pierre que algunos miembros de la sociedad de apoyo a la industria nacional, consideraran que subvencionar trabajos como el de ellos, que tenían carácter científico y no industrial, era contrario a los fines de la sociedad.
Albert Einstein dijo que la señora Curie era, de todos los seres celebres, el único que la gloria no ha corrompido, siguiendo como una extraña el curso de su propia vida, intacta, natural, casi insensible a su sorprendente destino. Tenía muchos enemigos de la comunidad científica de sexo masculino que menospreciaban su trabajo y afirmaban que sus primeros éxitos fueron posibles gracias a Pierre Curie.
Ernst Rutherford (1871-1937) físico y químico británico, nacido en Nueva Zelanda, hizo importantes trabajos sobre la radiactividad y obtuvo el Premio Nobel de Química en el año 1908. Escribió sobre los trabajos de Marie Curie, “se podría pensar que yo estaría leyendo el mío propio”. Creo que la pobre mujer se ha esforzado enormemente, y sus trabajos serán de gran utilidad por un año o dos, para ahorrarle al investigador su propia literatura, un ahorro que no es del todo favorable. Marie recibió el segundo Premio Nobel de Química al aislar el Radio y el Polonio (El nombre es en homenaje a su patria) en el año 1911, en sociedad, porque su marido Pierre Curie murió atropellado por su carruaje. Los científicos de esa época creían que Marie había recibido el premio debido a la tenaz perseverancia en lugar de su brillante inteligencia. Se quejaban, de que Madam Curie era justo lo que habían pensado que era, una tonta maldita, y que “ya se va a saber con seguridad en poco tiempo”. Donó los métodos para obtenerlos puros, a la comunidad científica, y en la primera guerra mundial recorría los campos de batalla con un móvil de rayos X junto a su hija Irene para apoyar los hospitales de campaña.
En mayo de 1921, gracias a la periodista William Brown Mary Meloney que dirigía una revista en Nueva York, Marie y sus hijas se trasladaron a Estados Unidos, donde, gracias a fondos recaudados entre la comunidad polaca, damas y algún otro millonario pudieron comprar un gramo de Radio, además consiguió el dinero para equipar su laboratorio.
El 4 de julio de 1934, Marie Curie murió en el sanatorio Sancellemoz. El médico, Dr. Tobe, informó: la enfermedad fue una anemia aplásica perniciosa de rápido desarrollo, con fiebre. La médula ósea no reaccionó, probablemente debido a que había sido dañada por una larga acumulación de radiaciones. En marzo de 1956 murió Irene, también víctima de la radiación, sufriendo los mimos síntomas que mataron a su madre.
El 20 de abril de 1995, los restos de ambos, Pierre y Marie, se trasladaron de la tumba en Sceaux al panteón de París. Marie Curie fue la primera mujer en ser enterrada por sus propios logros en el mausoleo nacional de Francia.
Fuente: Agustín Eduardo Maisterra