
Luna en Tauro
Después del fuego, el suelo.
Después de tanto movimiento,
el cuerpo pide quedarse.
Tauro no tiene apuro.
Sabe que lo que crece de verdad,
lo hace en silencio, sin forzar.
Hoy tu espíritu necesita raíz, no velocidad.
Es un día para:
ordenar lo material.
sostener lo que vale.
descansar sin culpa.
reconectar con lo simple.
Es una forma de recordarte que vivir también es detenerse.