La Legislatura porteña aprobó dos Leyes impulsadas por el Poder Ejecutivo que generan mejores condiciones para ponerse al día con deudas en impuestos locales y también se redujeron los honorarios de los mandatarios.
De esta forma, se validó una moratoria para deudas vencidas al 31 de agosto de 2025, correspondientes a los impuestos Inmobiliario/ABL, Patentes, Ingresos Brutos, Sellos, Publicidad, entre otros.
“Habrá facilidades de pago de hasta 48 cuotas y una condonación de intereses y punitorios con quitas de hasta el 100% según el plazo de adhesión al plan”, explicaron en el Poder Ejecutivo.
Además, los contribuyentes que tengan deudas en instancia judicial podrán “acogerse a la moratoria, lo que implicará la suspensión de los plazos procesales iniciados y de la prescripción penal. En caso de cancelar la deuda en su totalidad –ya sea al contado o mediante un plan de pagos–, se extinguirá todo tipo de acción”.
La segunda Ley promovida por el Ejecutivo que se aprobó reduce los montos que los vecinos porteños deben pagar a los mandatarios. Es por la gestión judicial para la regularización de deudas con la Ciudad en servicios como, por ejemplo, ABL, Patentes e Ingresos Brutos, explican en el GCBA.
“Hoy los vecinos que tienen esas deudas con la Ciudad son asignados a un mandatario para que lleve adelante la gestión judicial del cobro. El mandatario tiene garantizado un mínimo de honorarios y ese valor se ha ido distorsionando: el costo por el trabajo realizado se fue volviendo muy superior a la deuda. Por ejemplo, honorarios de más de $248.000 por una deuda de $50.000 que resultaban claramente excesivos”, indican fuentes porteñas.
La Ley actualiza los montos mínimos que se judicializan y establece una “nueva fórmula que asegura un equilibrio entre ambas partes involucradas, que reduce la carga para el vecino y a la vez el mandatario recibe un honorario equitativo”.
La AGIP deberá gestionar las deudas pequeñas de menos de $869.785, y quedará para la gestión de los mandatarios las deudas más grandes: “Entre varias regulaciones que se incorporan, establece un tope a sus honorarios según el monto de la deuda, y logra un esquema mucho más favorable para el vecino”.
Juan Castro