A solo tres días de las elecciones legislativas, el jefe de Estado argentino, Javier Milei, atraviesa una crisis política con la dimisión de Mariano Cúneo Libarona, ministro de Justicia, sumándose a la renuncia anticipada de Gerardo Werthein en Relaciones Exteriores. Con estas bajas, ya son cinco los colaboradores cercanos de Milei que dejarán sus cargos próximamente, generando una notable inestabilidad en el Gobierno ultraderechista en un momento clave.

Cúneo Libarona anunció que su renuncia se hará efectiva el lunes próximo, argumentando motivos personales. Su reemplazo aún no ha sido confirmado, pero en la Casa Rosada se rumorea una reestructuración que podría incluir la fusión de las carteras de Justicia y Seguridad, ante la salida prevista de Patricia Bullrich, ministra de Seguridad y actual candidata al Senado por La Libertad Avanza, partido de Milei.

El ministro de Defensa, Luis Petri, también aspira a un cargo legislativo en Mendoza, mientras que el secretario de Comunicación, Manuel Adorni, fue electo legislador en Buenos Aires, dejando vacantes claves en el Ejecutivo.

La renuncia más significativa fue la de Werthein, cuya gestión estuvo marcada por críticas internas tras el encuentro bilateral en la Casa Blanca entre Milei y Donald Trump. A pesar del acuerdo por un rescate financiero multimillonario para Argentina, incluyendo un swap de 20.000 millones de dólares y créditos privados, el auxilio quedó condicionado al resultado electoral, profundizando la incertidumbre.

El anuncio del nuevo canciller recayó en Pablo Quirno, exsecretario de Finanzas, destacado por su trayectoria en el mundo financiero y su rol en las negociaciones del rescate con Estados Unidos. Este nombramiento reafirma la apuesta de Milei por estrechar la alianza con Washington en materia de política exterior.