
El Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se adjudicó el resonante triunfo electoral de Javier Milei en las elecciones legislativas argentinas de octubre de 2025, presentando la victoria del líder libertario como un resultado en gran medida favorecido por el apoyo estadounidense durante el período previo a los comicios. En un mensaje publicado en su red social personal, Trump felicitó a Milei destacando su «trabajo excepcional» y reafirmó la confianza depositada en el mandatario argentino por parte del pueblo, señalando que los resultados electorales confirmaban ese aval.
Durante una reciente visita a la Casa Blanca, ambos mandatarios consolidaron una alianza que, según Trump, fue decisiva para mantener la estabilidad económica en Argentina frente a la crisis financiera. Entre las medidas de respaldo se incluyeron intervenciones en el mercado de cambios, acuerdos económicos relevantes como un swap por 20 mil millones de dólares, y negociaciones con el sector privado para créditos adicionales de igual monto. Trump advirtió en aquel encuentro que el éxito de Milei era crucial, manifestando que si el candidato libertario no ganaba, el apoyo económico y financiero estadounidense cesaría.
La contundente victoria que La Libertad Avanza logró en 16 de las 24 jurisdicciones nacionales, incluyendo la emblemática Ciudad Autónoma de Buenos Aires y la estratégica provincia de Buenos Aires, fue calificada por Trump como «un triunfo considerable», refiriéndose además a que la recuperación de activos argentinos generó beneficios económicos importantes para Estados Unidos. En declaraciones desde el avión presidencial rumbo a Asia, el líder estadounidense puntualizó que las inversiones y la calificación crediticia de Argentina mejoraron sustancialmente gracias a los resultados electorales.
Desde Argentina, la respuesta de Milei no se hizo esperar. Agradeció públicamente al expresidente estadounidense por su respaldo constante en estos tiempos de desafío, subrayando la importancia de mantener una alianza sólida entre ambos países y resaltando el compromiso mutuo en la defensa de la civilización occidental. Declaró además su disposición para continuar la batalla política y económica que ha permitido, según sus palabras, sacar de la pobreza a más del 90% de la población mundial.
Este vínculo se ha visto reforzado por elogios desde diversos sectores, entre ellos figuras como Scott Bessent, quien felicitó a Milei y destacó que la administración estadounidense liderada por Trump ha fortalecido la relación bilateral con Argentina, considerando al país sudamericano un aliado estratégico vital en América Latina. Además, la italianísima Giorgia Meloni y el asesor republicano Roger Stone se sumaron a las felicitaciones por el resultado electoral que ha colocado a Milei en una posición fortalecida para impulsar reformas en el Congreso argentino.
La influencia de Estados Unidos en la región parece consolidarse con un enfoque hacia la estabilidad económica y una alianza política con gobiernos afines, siendo el caso de Argentina uno de los ejemplos más visibles de esta estrategia. No obstante, el apoyo estadounidense incluye advertencias condicionadas, con la promesa de continuidad solo si el presidente argentino mantiene su liderazgo, legitimado por estos recientes comicios legislativos.
Este contexto político y económico abre un capítulo de importantes desafíos para Milei, quien deberá traducir ese respaldo electoral y externo en resultados concretos dentro del complejo entramado legislativo argentino, todo mientras enfrenta la expectativa de consolidar la estabilidad y atraer inversiones privadas para lograr la prosperidad que promete a la población fundamentalmente resolviendo la “deuda social” y atendiendo a los sectores más vulnerables de la población, que durante su gestión sufrieron el primer ajuste de la gestión de la LLA.